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Bichos en red: una mirada a la ciencia desde el arte

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Amarillo, negro, verde esmeralda, café, magenta; el color que se desee. La vida y tonalidades de los bichos polinizadores de El Cajas hacen posible que este texto exista.

 Bichos en red es la exposición interactiva de una investigación de más de un año. Está dedicada a estudiar cuatro insectos polinizadores del Parque Nacional: abejas, escarabajos, mariposas y moscos. Fue desarrollada por biólogos, fotógrafos, diseñadores, productores, curadores, etc. Mezcla el arte y la ciencia para la difusión y su principal objetivo es crear conciencia sobre la importancia que tienen estas especies en la vida de los diferentes ecosistemas.

 La exposición

Se divide en cinco salas del Museo Municipal de Arte Moderno. La primera sala consta de doce módulos, con fotografías de campo que explican cómo fue hecha la investigación. La segunda y tercera presentan experiencias intensas: dos salas oscuras en las cuales se exponen las fotografías detalladas de Eduardo Carrasco. 

El fotógrafo explica que la técnica usada fue el photo stacking o apilamiento de imágenes, con el fin de hacer una sola fotografía se necesitaron más de 100 fotografías, lentes macroscópicos e incluso lentes de microscopios adaptados a la cámara.

Un trabajo fascinante que junta la oscuridad y la luz de forma complementaria. El espectador se sumerge en la majestuosidad macroscópica de animales que generalmente se consideran desagradables. Aquí se observa de mejor manera su geometría, morfología y vistosos colores. 

La cuarta sala permite la interacción con el usuario. Mediante una tablet se tiene el modelado 3D del bicho para girarlo (hacia cualquier lado), acercarse y alejarse, mientras se visualiza esta imagen en la pared a través de proyectores. 

Eduardo Carrasco, biólogo y fotógrafo junto a su obra

Finalmente, en la última sala a través de sensores, se tiene la captación del movimiento humano. Mediante esta, se guía a una proyección de bichos a imitar las acciones del espectador con el objetivo final de polinizar una flor. 

Esta interacción es una forma de jugar y cambiar el pensamiento de que en un museo no podamos tocar nada y no nos permiten interactuar”, manifiesta Monserrath Tello, coordinadora y productora del proyecto.

Monserrath Tello, jefe de investigación cultural - Universidad Católica

“¡Qué lindos han sido los bichos!”

Esta es la frase más impactante para Stefano Toracchi, director e investigador de la exposición. Fue mencionada por su hijo al visitar las distintas salas expositivas y conocer extraordinarios detalles como las alas de las mariposas, los pelitos de las patas de los insectos y la perfección de todas las estructuras naturales.

Para Toracchi, la conservación de los polinizadores es vital, su desaparición evidente de varios espacios en los que antes abundaban fue la inquietud inicial para empezar a investigar. Este biólogo asegura que cumplen el rol más importante dentro de los ecosistemas.

Stefano Toracchi, director del proyecto de investigación

Los bichos y el futuro

La difusión interactiva de la ciencia a través del arte se vuelve necesaria en un mundo en el que el rol de los polinizadores se desconoce. Sin ellos se rompería el equilibrio natural básico de cadenas alimenticias, llegando a afectar la vida de varias especies e incluso provocando la extinción de algunas, entre ellas la nuestra.

Justamente Bichos en Red, dice Monserrath, tiene un juego de palabras interesantes: la palabra red no solo involucra una estructura de vida de los polinizadores, red en inglés significa rojo y este color se asocia generalmente con situaciones de alerta.  

¿Qué es lo que pasaría si es que los bichos polinizadores desaparecen? ¿Qué es lo que sucedería con las plantas? ¿Qué sería de nosotros?

Esperemos que estas preguntas no tengan que ser respondidas nunca.

Eduardo Carrasco

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