Picturatus. Ilustración científica y naturalista de la biodiversidad ecuatoriana

porCamila Peña24/06/2022

Presentado por:

Una leyenda parisina del siglo XVIII cuenta la historia de un astrónomo que se instalaba durante las noches, en los puentes, con un pequeño telescopio. Su objetivo era mostrar a los transeúntes las maravillas del cosmos. Para combatir la reticencia astronómica de algunos de sus compatriotas, llevaba consigo una caja de rapé con arañas vivas, que engullía con gran naturalidad para llamar la atención y atraer a los curiosos.

Aunque se atribuyen estos sucesos a Joseph-Jérôme Lefrançois de Lalande, no se sabe si sucedieron o si pertenecen al pensamiento mágico colectivo. Sin embargo, es la manera en la que se introduce un punto crucial en la difusión de la ciencia: la creatividad que se requiere para captar la atención del público.

Picturatus

Noemí Cevallos, bióloga e ilustradora científica y Santiago Cordero, diseñador gráfico con estudios en dirección de arte e ilustrador, conforman Picturatus. Un emprendimiento promotor de la ciencia, que utiliza la ilustración científica y naturalista, como herramienta para fomentar la conciencia ambiental y dar a conocer la biodiversidad del Ecuador.

Noemí: Creemos que la gente realmente puede cuidar algo cuando le toma cariño. Entonces, tú no puedes tomarle cariño a nada que no conoces. Muchas veces es muy difícil observar a las especies en la naturaleza o leer un artículo científico, pero creemos que la imagen y el arte son estos puentes que sensibilizan a la comunidad.

El ser humano tiene un ansia inherente de conocimiento. La ciencia es la clave para la resolución de conflictos trascendentales del mundo, así como el elemento definitorio de su progreso. Sin embargo, la satisfacción de esta necesidad y derecho se consigue en mayor o menor medida, acorde al lugar del mundo o incluso del país en el cual nos situemos.

Para Picturatus nos encontramos en el mejor momento para la divulgación de la ciencia, gracias a las redes sociales. Señalan que la comunicación actual tiene alcances muy amplios, pero se requiere buscar estrategias alternativas para llegar a la comunidad. Una herramienta muy acertada es el dibujo, puesto que la imagen simple puede comunicar lo complejo y también se logra buscar la belleza.

Dibujar la biodiversidad

Aunque su trabajo junto a científicos e instituciones como USF, TEDX, WWF, National Geographic, entre muchas otras; es importante, esto no determina su enfoque principal. A través de talleres, los dos ilustradores buscan llegar a cualquier persona que desee adentrarse en la observación y práctica del dibujo. Estos espacios de corta duración desean vincular a la sociedad con temáticas ambientales y científicas.

Los talleres se han realizado en colaboración con museos científicos y universidades, como: PUCE (Quito), UDA (Cuenca), Ikiam Universidad Regional Amazónica (Tena), YACHAY Universidad (Imbabura), Escuela Superior Naval, (Santa Elena), Museo de Historia Natural (Lima), Fundación Centro de Estudios de Ecología Aplicada (Chile), Universidad de Bolivia (La Paz), Ministerio de Desarrollo de Bolivia (Santa Cruz), Universidad Nacional de Costa Rica (San José), Universidad Anáhuac (Cancún -México), entre muchos otros.

Además sus ilustraciones han formado parte de varias publicaciones como Palmas ecuatorianas, Flora de Hepáticas y Antoceros del Ecuador, Libro rojo de las plantas endémicas del Ecuador y The Amphibians and Reptiles of Mindo.

El proceso para ilustrar una especie tiene una complejidad grande, ya que se requiere mucha técnica. Para empezar, es necesaria la descripción científica de la especie, por medio de la cual se conocen detalles del color, tamaño, cambios y condiciones. Esta información se apoya en fotografías, videos, visitas a laboratorios y salidas de campo para ver los animales en vivo.

Picturatus recibe su nombre en honor a una rana pequeña y esta palabra proveniente del latín “picturata”, significa “decorado con color”. Santiago nos invita a conocer la biodiversidad del Ecuador, desde sus detalles más pequeños, como una manera de volver a ser niños y por su parte Noemí, recalca la necesidad de despertar nuevamente la curiosidad.

Observar su obra puede ser un paso sencillo y a la vez muy significativo. Podemos apoderarnos de nuevos colores y de igual manera, despertar ese sentido de pertenencia tan necesario para proteger la biodiversidad.